Aquí estamos

Me acompañan mis primeros pasos,
mi mameluco verde,
los cantos de mu abuela madre,
los tangos domingueros de mi padre.

Aparecen ahora las escuelas,
el sabor rancio de las galletas
y la leche con que la dictadura
pretendía alimentarnos.
Aparecen mis pequeñas alpargatas,
los primeros chuteadores,
los primeros goles.

Están aquí conmigo
los compañeros, las barricadas,
mis muertos, nuestros muertos.

Están las voces roncas,
inundando las calles,
el coraje.

Surgen los nombres, las voces,
los cuerpos que alguna vez tuve,
que todavía tengo.

Mi primer beso,
el primer derrame,
el primer vuelo.

Está aquí y ahora mi suicidio,
mi resurrección,
todas mis risas,
todos mis llantos.

Están aquí también mis amigos y enemigos,
mis miedos, mis derrotas,
también mis victorias.

Aquí estamos todos
por los siglos de los siglos.
Amén